Autor: Burés Professional, SA. La corteza de pino es uno de los materiales que se usan con mayor frecuencia para realizar un acolchado, es decir, la capa de material orgánico que se coloca sobre el lecho del jardín.
La corteza de pino cribada es la más habitual en el mercado, se consigue después de un proceso de filtrado obteniendo las piezas más pequeñas, y permite un acabado más homogéneo y se recomienda para las plantas más finas y pequeñas.
VENTAJAS DE LA CORTEZA DE PINO
- Protege el suelo de la climatología: Debemos tener en cuenta el suelo, así como la lluvia, el viento, el frío y las heladas porque tienen una repercusión directa sobre la tierra. La compactan, la erosionan e, incluso, arrastran los nutrientes que puedan contener, La presencia de la capa de corteza de pino evita, precisamente, que esto pueda suceder.
- Ayuda a conservar la humedad: La corteza de pino funciona como una barrera que impide que el suelo se caliente demasiado, lo cual es muy útil en verano, y reduce la humedad que el sustrato pierde por la evaporación. Además, evita (o pierde importancia) el crecimiento de la hierba que, en general, también necesita grandes cantidades de agua. Como consecuencia, las necesidades de riego del jardín resultan inferiores, con el consiguiente beneficio tanto para el medio ambiente como para la economía doméstica.
- Impide el desarrollo de malas hierbas: Los fragmentos pequeños de corteza de pino dificultan de manera notoria el desarrollo de malas hierbas. Las plantas adventicias no tan solo roban los nutrientes a nuestras plantas, sino que, además, son imanes para las plagas. Por este motivo, la corteza de pino evita la exposición solar sobre el sustrato y la proliferación de estas hierbas poco deseadas.
- Mejora la filtración de agua: Si el suelo esta al descubierto, la evaporación retenida en el sustrato se facilita, hecho que exigiría regar con más frecuencia. Pero si contamos con la corteza de pino, esta actúa como una especia de esponja, mejorando la absorción del agua del riego o de la lluvia y manteniendo la tierra húmeda por más tiempo.
- Se puede pisar: Algunas variedades de plantas imponen limitaciones, como evitar pisarla para procurar su mejor crecimiento y desarrollo, la cual cosa obliga a ciertas incomodidades. La corteza de pino, en cambio, es un material muy resistente, que se puede pisar sin mayor prejuicio.
- General bonitos contrastes con el verde de las plantas y los arbustos: A nivel decorativo, el color oscuro de la corteza de pino permite que los colores de las plantas y flores del jardín destaquen. Permite, también, la formación de senderos o la separación de diferentes áreas del jardín.
- Buen aroma: El olor de la corteza de pino es fresco y agradable, la cual cosa representa una ventaja más en el momento de colocar el acolchado.
- Biodegradable: Los acolchados naturales aportan materia orgánica al suelo al final de su ciclo dado que, antes o después, la corteza de pino se descompone y se transforma en un humus perfecto para fertilizar la tierra.
- Mejora la vida del suelo: La descomposición de la corteza de pino mejora la actividad de los microorganismos que habitan en el sustrato. Lejos de ser una amenaza, estos microbios hacen que nuestro suelo sea más rico en minerales.
- Evita la compactación del suelo: Los suelos arcillosos tienden a compactarse rápido, por tanto, el agua -tanto de lluvia como del riego- suelen generar charcos en la superficie y no baja a las capas más profundas. Así es como un jardín parece bien regado, pero, en realidad, está seco por debajo, lo que, además, significa un desaprovechamiento del recurso hídrico.
En BURÉS PROFESIONAL S.A., cuentan con un producto calibrado en diferentes granulometrías (8-15 mm, 16-25 mm y 25-40 mm). Por este motivo, este producto es adecuado para aplicarse en jardines, macetas y jardineras. Más información: Verd-Recycling, de Burés Professional.
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